Este reloj aporta la estética de diseño pura, discreta y sutil de Grand Seiko al reloj de vestir. La caja curvada y el cristal de zafiro hablan de tradición y el arte que hace posible el reloj es evidente en la curva perfecta del minutero, que se dobla a mano para seguir exactamente los contornos del dial. El movimiento tiene un diseño delgado que oculta su potencia y precisión.
La belleza de la tranquilidad
En la ceremonia del té japonesa "Sado", cada objeto está formado por la naturaleza y cada acción tiene su propio ritmo tranquilo. Es un arte silencioso y tranquilo en el que la armonía es un tema central.
Al igual que la ceremonia del té, este reloj también tipifica la belleza y la tranquilidad del Japón tradicional. Sus agujas e índices tienen el delicado brillo que sólo los ángulos más agudos pueden crear, mientras que las curvas y los contornos redondeados de la caja y el dial desprenden una tranquila serenidad. Cuando se contempla el reloj, al igual que cuando se bebe por fin un matcha en la culminación de una ceremonia de Sado, uno queda impresionado por la belleza de la armonía. Hay cosas que son perfectas.
El ajuste perfecto
Con su delgado movimiento de cuerda manual y la forma redondeada de la caja, este bonito reloj de vestir presenta un perfil delgado desde todos los ángulos y se adapta perfectamente a la muñeca. Lo sorprendente es que esto es así sea cual sea el tamaño de su muñeca. Gracias a las asas delicadamente curvadas, el reloj se adapta perfectamente a una muñeca pequeña o grande. Llevarlo es creerlo; es como si estuviera hecho a medida para usted.
